Recomendados

viernes, 4 de diciembre de 2009

MARIO RUBÉN ALVAREZ - LO MEJOR DEL FOLKLORE PARAGUAYO / BIBLIOGRAFÍA DEL FOLKLORE PARAGUAYO

LO MEJOR DEL
FOLKLORE PARAGUAYO
Selección e introducción:
MARIO RUBÉN ALVAREZ
Colección: Hacia un país de lectores Nº 3
Editorial El Lector,
Director Editorial: Pablo León Burián,
Asesor Editorial: Roque Vallejos.
Diseño e ilustración de tapa:
JUAN MORENO
Asunción-Paraguay 2002. 126 pp.
.

PRÓLOGO MEMORIA DE UN PUEBLO
** Todas las sociedades poseen una gran cantidad de conocimientos. Cuando esa herencia cultural que se transmite en el tiempo, de padres a hijos, reúne algunas características específicas, se llama folklore.
** El Paraguay tiene su universo peculiar de sabidurías que podrán no leerse en un libro y no figurarán en relevantes estudios, pero están allí, forman parte de la vida de la comunidad y tienen aplicaciones concretas, en momentos bien definidos.
** El folklore es nuestra memoria colectiva, aquel cordón umbilical que nos conecta a una historia y que nos permite identificarnos y diferenciarnos de los demás. Es un pensar, un sentir y un obrar que nos unifica como pueblo con raíces históricas comunes, con dolores y alegrías compartidos, con fracasos y esperanzas comunes.
** Somos un pueblo mestizo que provenimos de dos troncos culturales marcados a fuego por sus lenguas: el guarani y el español. Es en esta matriz bicultural y bilingüe donde se fragua nuestra identidad.
** Este breve libro es, apenas, una rápida aproximación a esa realidad viva, vigente y cotidiana que es el folklore. Es, por otro lado, una compilación de compilaciones, con algunos aportes inéditos. Su modesta intención es proporcionar una información básica acerca de los hechos folklóricos que permite a los lectores encontrar algunos de los componentes esenciales de este universo complejo, amplio y rico en expresiones.
** El afán no es hacer una exposición fría y técnica de los diversos componentes del folklore. Por eso, los ejemplos con los que se ilustran los diversos temas les dan calor y color a los diversos capítulos.
** Bueno es aclarar que la selección realizada no es "lo mejor del folklore", aunque la colección de El Lector lo rotule de este modo, atendiendo a su línea de producción editorial. Decir que una expresión -un compuesto, por ejemplo-de este ámbito es más que otra equivale a la emisión de un juicio de valor a partir de ciertos criterios escogidos de antemano, lo cual está lejos del objetivo de esta publicación.
** Si bien el texto va dirigido a todo público, querríamos, sobre todo, que los jóvenes sean sus destinatarios preferenciales. Su ordenamiento y tono didácticos apuntan a quienes necesitan con urgencia moldear una identidad vigorosa, para insertarse luego en lo universal. El objetivo es introducirlos al territorio del folklore para que luego busquen la manera de ahondar sus indagaciones, sintiéndose parte de una colectividad que le da valor a lo que es auténticamente suyo. La bibliografía que se inserta al final tiene esa finalidad.
El compilador Asunción, invierno del 2002
.
PARTE I
CAPÍTULO I

FOLKLORE. DEFINICIÓN
** En el entorno social en el que vivimos cotidianamente encontramos un amplio universo de costumbres, usos, tradiciones, poesías, canciones, refranes, cuentos, mitos, leyendas, músicas, creencias, supersticiones y otras expresiones de lo que llamamos, genéricamente, SABIDURÍA POPULAR.
** A esos conocimientos el arqueólogo inglés WILLIAMS JOHN THOMS bautizó con el nombre de FOLKLORE. Para formar este término unió dos palabras del inglés: folk, pueblo; y lore, saber. Utilizó ese vocablo por primera vez el 12 de agosto de 1846, en una carta remitida por él a la revista EL ATENEO que se editaba en Londres. Diez días después se publicó la misiva, por lo que el DÍA DEL FOLCLORE se celebra en casi todo el mundo cada 22 de agosto.
** Desde entonces, FOLKLORE es todo lo relacionado a la sabiduría popular que reúna ciertos requisitos claramente determinados y a la ciencia que lo estudia, dentro de la Antropología Cultural. A los efectos de diferenciar los hechos de la disciplina se adopta la convención de la minúscula -en la letra inicial- para los primeros y la mayúscula para la segunda. FOLKLÓRICO es todo lo vinculado a ese mundo; FOLKLORISTA sirve para referirse a quien lo conoce con solvencia; FOLKLORÓLOGO es una autoridad en la materia; y folklorismo es su falsificación o desviación.
** Cuando un ser humano crece, va socializándose, adquiriendo una visión del mundo que parte de su entorno físico y humano, se apropia de lo que los demás seres humanos le ofrecen en un determinado momento de la historia, en una situación concreta. Así, lo ya dado en una región, en un país, se transforma en conocimiento y vivencia de quien necesariamente tiene que aprender lo que le rodea para poder sobrevivir entre sus semejantes.
** La fuente del aprendizaje del folklore es la misma sociedad que algunos prefieren llamar el pueblo, la masa, la mayoría. Allí están los contenidos que se adquieren y se van reelaborando a medida que transcurre el tiempo.
.
LA ORALIDAD
** La lengua es el principal vehículo de su transmisión. La memoria colectiva se traduce en palabras que, de generación en generación, van reproduciendo los contenidos del folklore. En nuestro país la tradición oral ha sido fundamental para conservar numerosas expresiones de la sabiduría de nuestro pueblo.
** El bilingüismo paraguayo -el hecho de que la mayor parte de la población hable y entienda el español y el guarani- le ha dado un sabor único al folklore que se canaliza a través del vocabulario. En el jopara -mezcla del guarani y el castellano en el habla- se expresa gran cantidad de situaciones que reflejan puntos de vista o estados de ánimo que con otro código lingüístico no se manifestarían de un modo tan certero y rotundo.
** Por otro lado, el hecho de pertenecer a un país bicultural (guarani-español) dota al folklore paraguayo de una gran riqueza. "Una nación, dos culturas" llama, certeramente a esta situación, el padre Bartomeu Melià, antropólogo español que vive en nuestro país. Buscar en profundidad las raíces del ÑANDE REKO -nuestro modo de ser-, a menudo, es encontrarse con elementos españoles o guaraníes que fueron adquiriendo localmente un perfil propio, releídos desde la óptica de lo mestizo. La doble vía de alimentación del folklore dificulta su interpretación, pero no la vuelve inaccesible, puesto que quienes le dan vida no se preguntan acerca de su procedencia. Lo hacen suyo y basta.
** El folklore no se agota en las palabras. También determina comportamientos que se aprenden y se ponen en práctica en ciertas ocasiones dadas. Las convicciones que generan los conocimientos tenidos como científicos -fenómenos que responden a causa-efecto inalterables- llegan, en algunos casos, a niveles de dogma. Las creencias y supersticiones, en algunos casos, sobrepasan los límites de lo razonable.
.
IDENTIDAD
** El folklore está cargado de significados y, en algunos casos, le da una dirección y un sentido a la conducta de las personas. Menospreciar o censurar su contenido es ignorar las características peculiares de una colectividad y no respetar el derecho de poseer una identidad basada en lo que la propia historia de su pueblo le va entregando como herencia a lo largo del tiempo.
** Un vicio frecuente en nuestro país es otorgar el apelativo de folklore a manifestaciones del arte o del comportamiento que no pueden ser categorizadas con rapidez por quienes se enfrentan a una realidad dada. En la música, por ejemplo, con suma facilidad se emplea la voz para referirse a composiciones que, en sentido estricto, nada tienen que ver con el folklore. Lo correcto es decir que tal o cual obra musical es de inspiración folklórica, pero no que sea folklore propiamente dicho. Esto se da -cuando al menos uno de los autores- puede ser el de la letra o el de la música es conocido.
.
CARACTERÍSTICAS
** Para que algo pueda ser tenido como folklore es necesario que reúna condiciones precisas y perfectamente identificables con parámetros de aceptación universal en la materia.
** El hecho folklórico, en primer lugar, es ANÓNIMO. No se conoce al autor de un poema, de un ÑE’ẼNGA o de una música. Puede ocurrir que al principio se lo identifique, pero que con el tiempo desaparezca. En el Paraguay esto ocurría con frecuencia en el dominio de la oralidad donde el autor transmitía a otros su obra -en el caso de los compuestos, por ejemplo-, sin que haya un registro de su autoría. Es de alguien y punto. Sin embargo, en la difusión -el que aprendió de la fuente original le comunica a otro, éste a otro y así sucesivamente-, de a poco, se va perdiendo el rastro inicial hasta desaparecer completamente la identidad de su creador.
** Es -el hecho folklórico-, también, TRADICIONAL. Es un mba'ekuaa -conocimiento- que viene desde lejos, en el tiempo, repetido por generaciones. Los hijos lo heredan de sus padres que, a su vez, lo recibieron de los suyos. No se hacen preguntas en torno a su existencia: una persona se incorpora, como el afluente de un río, a una matriz social ya existente.
** El folklore, en gran medida, es ORAL. Si bien en los últimos años hubo un esfuerzo más sostenido -sobre todo por las exigencias de la Reforma Educativa-, por revertir esa situación, los contenidos del folklore son, esencialmente, verbales. Se transmiten a través de la palabra. Están almacenados en la memoria colectiva que reproduce de un modo no uniforme -por eso uno existen las "versiones"- los contenidos folklóricos. Cada fuente -pongámosle los casos de Perurimá- recrea en la palabra lo que sabe y la transmisión está sujeta a su riqueza imaginativa, a su habilidad verbal, a sus olvidos y a sus estados emocionales. Lo que se pone por escrito es apenas una manera de relatar lo escogido, sobrando aún diversos modos de hacerlo. Es imposible, desde luego, escribir todas las versiones existentes.
** El discurso de los hechos tiene la misma lógica. Elijamos la danza como ejemplo. Se la "muestra" a través de la palabra, al contarse los movimientos y se los reproduce de acuerdo a pasos secuenciados que el emisor del mensaje domina. No hay una sistematización en la materia. En los baches del recuerdo, hay intervención de los protagonistas. Por eso, puede existir una distancia entre la versión inicial y la que pervive en la actualidad. Entre las melodías de las "danzas de época" que datan de mediados del siglo XIX en nuestro país, recogidas por Luis Szarán, y las que ejecutan actualmente las bandas populares existen diferencias.
** Es ÚTIL, responde a una necesidad de expresión que brota de la libertad en un momento determinado. Cumple una función individual y colectiva en el sentido de que canaliza el deseo de manifestación de un ser humano, pero luego se vuelve un sentimiento que se extiende a los demás.
** El uso del folklore responde a un clima espiritual que reclama una forma determinada que lo materialice.
** Es VIGENTE, sobrevive a los embates de los años. Forma parte de la sabiduría de los contemporáneos. Lo que ya se olvidó o permanece sólo en la memoria de unos pocos, sin alcance masivo, forma ya parte del FOLKLORE MUERTO o EN VÍAS DE EXTINCIÓN.
** El folklore es DINÁMICO, Desde el mismo momento en que sobrevive a través de la oralidad, esta característica le es inherente. Conserva lo esencial de su ropaje, pero la gente le va dando colores nuevos conforme avanza la humanidad. En este sentido, hay una permanente recreación colectiva. No se esclerosa en una forma, sino que se va reinventando a través de sus cauces naturales, que son las personas que lo mantienen vigente.
** Es oportuno dejar bien sentado que las pretendidas "innovaciones" folklóricas no son sino aberraciones condenables. Transformar y, más aún, desvirtuar una manifestación -por ejemplo, las canciones de Semana Santa de los "Estacioneros" o "Pasioneros” son "corregidas" por algunos, en el mal entendido afán de "poner bien" lo "incorrecto"- es abominable. No se puede "intervenir" una vivencia o un conocimiento popular fuera de una lógica que está dada por el espíritu de su contenido. Una "adaptación" o un "arreglo" que pase por encima de esta norma -el respeto al espíritu del folklore- es más bien un crimen antes que un aporte.
** El folklore es MASIVO, de un segmento poblacional considerable de habitantes de una región o de un país. Es un patrimonio colectivo del que nadie puede adueñarse porque no es de nadie y es de todos.
** Es, igualmente, POPULAR, entendido este vocablo como perteneciente al pueblo llano, de menor índice de escolaridad y de recursos económicos más modestos, de vida más sencilla y menos apegada a los requerimientos de la sociedad de consumo. No es, sin embargo, patrimonio exclusivo y excluyente de la clase social más marginada.
** A esta característica, a menudo, se la llama vulgar. Esta denominación entraña una trampa, cuando no un abierto prejuicio hacia lo popular. Si bien el vocablo está usado como sinónimo de lo que le pertenece al vulgo, a la gente común, en su acepción actual más extendida se aproxima más a lo chabacano, trivial, e incluso de mal gusto Por ello es mejor llamarlo popular antes que vulgar. Tampoco hay que entender que el folklore es pertenencia exclusiva de los campesinos. Su área de manifestación trasciende la simplicidad de la oposición ciudad/campo; urbano/rural y otras formas de polarizaciones inadecuadas.
** Es, finalmente, DIGNO. Su conocimiento y su práctica no menoscaban ni disminuyen la personalidad de quienes lo conocen y/o practican. Al contrario, lo realzan, porque marca un rasgo de identidad que merece respeto y consideración. Quien baila una polka o recita en guarani un poema no es inferior a quien mueve la cintura al ritmo del rock o declama en inglés. Lo ideal es poder manejar los dos códigos: ser particular y universal, al mismo tiempo.
** En estos tiempos en que la globalización llega como una avalancha que pretende borrar las identidades locales para eliminar las resistencias a su política de atropello y avasallamiento, se vuelve urgente e imprescindible reafirmarse en los valores propios de nuestra cultura, abriéndose a la tecnología y a la filosofía propias de este inicio del siglo XXI.
.
SU UNIVERSO
** El ámbito del folklore es amplio y rico. La sabiduría de nuestro pueblo se expresa a través de diversas formas, que constituyen el canal de circulación de contenidos que forman parte de la memoria colectiva. Si hurgáramos en su significación, hallaríamos que reflejan una postura ante la vida, un modo de ser y un pensamiento en acción.
** Abarca poesías -desde los compuestos musicalizados que se convierten en crónica de muertes hasta las letras de canciones de cuna-, ñe’ẽnga-refranes-, cuentos, casos, adivinanzas (maravillas), mitos, leyendas, músicas, danzas, creencias, supersticiones, religión, juegos y diversiones.
** También incluye conocimientos acerca de comidas, viviendas, recolecciones diversas -caza, pesca, agricultura, ganadería-, textiles, alfarería, cerámica, cestería, maderas, clima, nacimientos, búsquedas, traslados, supervivencia, oficios y formas de defensa personal.
** Algunos contenidos de la lengua-marcantes, giros, defectos, denominaciones de lugares y resemantizaciones-, así como los conocimientos de plantas medicinales y las recetas de yuyos para diversas enfermedades, son también parte del folklore. Igualmente, ingresan a su esfera de influencia lo mágico -el paje y otros-, las fiestas populares, lo que gira en torno a la muerte y formas de solidaridad con los semejantes.
.
LOS RECOPILADORES
** Los RECOPILADORES -o COMPILADORES- son los que realizan la meritoria y paciente tarea de buscar a lo largo y a lo ancho del país rastros verdaderos que conduzcan al rescate de expresiones del folklore.
** La oralidad es una rica fuente para encontrar versos, compuestos, músicas, cuentos, refranes y otras manifestaciones del folklore. Los testimonios de personas de edad son valiosos documentos que permiten rescatar joyas que, de otro modo, estarían condenadas a la extinción.
** Los recopiladores honestos son los que toman de boca de sus informantes los datos que reciben, guardando fidelidad a lo que se les relata, sin intervenir un ápice en el material recogido.
.
CLASIFICACIÓN
** De acuerdo a la perspectiva que se utilice para abordar el folklore, tendremos diversas clasificaciones.
** Si mirásemos su permanencia o no en el conocimiento, tendremos folklore MUERTO O VIVO. Las manifestaciones de lo primero son aquéllas que han quedado sepultadas en el olvido. Se tiene información de ellas a través de documentaciones escritas o de testimonios de conocedores que recuerdan sus características.
** Desde esta óptica también se tiene el folklore NACIENTE donde se incluyen aquellas expresiones que antes no existían y que van adoptando, lentamente, las características que las convierten en folklóricas.
** El folklore vivo es, obviamente, el que en la actualidad forma parte del conocimiento y la práctica de un segmento considerable de la población.
** Si se adopta como punto de partida el ámbito -interior o exterior- que abarca, el folklore puede ser ESPIRITUAL, SOCIAL Y MATERIAL.
** El ESPIRITUAL -también llamado ANIMOLÓGICO por provenir del ánima, alma- abarca las formas literarias en verso y prosa/-sean poemas, cuentos, refranes, leyendas, mitos, adivinanzas y chistes, así como música, danza, supersticiones, creencias, etc- que determinan una visión del mundo, un parecer acerca de la realidad.
** El SOCIAL -conocido también como sociológico- es el que atañe a las vivencias que se dan en las relaciones interpersonales. Abarca lo que se podría llamar la práctica social del folklore, en oposición a lo individual. Es lo que se vive o se comparte en comunidad de acuerdo a un calendario de celebraciones dado o de acuerdo a las circunstancias que se presentan en la existencia.
** Aquí deben incluirse todo lo que atañe a las lenguas de nuestro país (guarani/ español), los pasatiempos, la música y las fiestas patronales
** El material -o ergológico-, donde se incluyen conocimientos concretos llevados a la práctica en la vida cotidiana, como alimentación, agricultura, pesca, caza, transformación de productos primarios, maderería, cestería, alfarería, formas de transportar, oficios y profesiones.
** Por considerar que esta última forma de clasificación es la que mejor responde a una rápida aproximación de lo que es folklore, teniendo en cuenta sobre todo un sentido didáctico-informativo, la adoptamos en este texto.
.
ÍNDICE - PRÓLOGO
PARTE I
CAPÍTULO I:
FOLKLORE / LA ORALIDAD / IDENTIDAD / CARACTERÍSTICAS / SU UNIVERSO / LOS RECOPILADORES / CLASIFICACIÓN
CAPÍTULO II: FOLKLORE ESPIRITUAL / POESÍA, MÚSICA Y DANZA / LA POLKA / COMPUESTO / PERICÓN-RELACIÓN / CANCIONES DE CUNA / CANTO DE ESTACIONEROS / KURUSU ÁRA / CANCIONES NAVIDEÑAS / JEJUVYKUE JEJORA / KÁÑA NEMOÑE’Ẽ / VERSOS DEL TRUCO / LAS DANZAS
CAPITULO III: CUENTOS O CASOS / PERURIMA / PYCHÁĨ / KA'I / PLATA YVYGUY / ÑANDEJÁRA KÁSO
CAPÍTULO IV: LOS REFRANES O ÑE'ENGA / HUMOR / AMOR / ANIMALES / LA LEY / BORRACHOS / GASTRONÓMICOS / CONDUCTA / TIEMPO / RELIGIOSOS / MUJER / HOMBRE (ARRIERO) / POBREZA / ESPERANZA / POLÍTICOS / "VERDES" / DESGRACIA / EL DESTINO / LA MUERTE / MARCANTES
CAPÍTULO V: EL MITO / MÁS LITERATURA QUE MITO / APORTE FUNDAMENTAL / LA PRIMERA TIERRA (FRAGMENTO) / OTROS MITOS / POMBÉRO / PÓRA / MALA VISIÓN / KARAI VOSA / KARAI OCTUBRE / LOS PROTECTORES
CAPITULO VI: LAS LEYENDAS / EL LAGO YPACARAÍ / LA VIRGEN DE CAACUPÉ / YKUA BOLAÑOS / SAN BLAS / PA'I SUME o SANTO TOMÁS / LOS HERMANOS TUPI Y GUARANI / KA'I / CHAVUKU / KOROCHIRE / KARÁŨ
CAPÍTULO VII: CREENCIAS / LO QUE LA GENTE CREE / LA MAGIA DE LA LUNA
.
PARTE II
CAPÍTULO VIII:
FOLKLORE SOCIAL / LOS JUEGOS / JUEGOS DE NIÒOS / VALÍTA (BOLITA) / TIKICHUELA o CHIQUICHUELA / BALERO o BOLERO / PANDORGA / DESCANSO / TUICA’Ẽ / TROMPO / ADIVINANZAS / OTROS JUEGOS DE NIÑOS / JUEGOS DE ADULTOS / CARRERA DE CABALLOS / SORTIJA / CORRIDA DE BANDERA / TORO ÑEMOÑARÕ / CARTAS / RIÑA DE GALLOS / JUEGOS DE SAN JUAN / LAS PRUEBAS / LOS OFICIOS
CAPÍTULO IX: RELIGIÓN / NAVIDAD / SEMANA SANTA / ABOGADOS o PROTECTORES
CAPÍTULO X: LA MUERTE / ADULTO / ANGELITO
.
PARTE III
CAPÍTULO XI:
FOLKLORE MATERIAL / GASTRONOMÍA / MAÍZ / MANDIOCA / CARNE VACUNA / CARNE DE CERDO / COMIDA DEL CAMINO / POSTRES / BEBIDAS / TABÚES Y CREENCIAS
CAPÍTULO XII: MEDICINA NATURAL / PLANTAS MEDICINALES / ALGUNAS RECETAS / EL PAJE / PARA CAUSAR MALES Y DESGRACIAS / PARA CONSEGUIR SER AMADA / PARA ENAMORAR A UN HOMBRE / OTROS ASPECTOS DEL FOLKLORE MATERIAL
BIBLIOGRAFÍA DEL FOLKLORE PARAGUAYO
.
BIBLIOGRAFÍA DEL FOLKLORE PARAGUAYO
.
· GONZÁLEZ TORRES, DIONISIO. Folklore del Paraguay, Asunción, 1980.
· GONZÁLEZ TORRES, DIONISIO. Cultura Guarani, Asunción, 1991.
· GONZÁLEZ TORRES, DIONISIO. Catálogo de plantas medicinales usadas en Paraguay, Asunción, 1986.
· DE CARVALHO NETO, PAULO. Folklore del Paraguay, El Lector, Asunción, 1996.
· DE GUARANIA, FÉLIX. Tavaygua arandu, Asunción, 2002.
· BEJARANO, RAMÓN C. Caraí vosá, Toledo, Asunción, 1982.
· GATTI, CARLOS. Enciclopedia Guarani-Castellano de Ciencias Naturales y Conocimientos Paraguayos, Arte Nuevo, Asunción, 1985.
· CARDOZO OCAMPO, MAURICIO. Mundo folklórico paraguayo (primera, segunda y tercera partes), Cuadernos Republicanos, Asunción, 1991.
· CARDOZO OCAMPO, MAURICIO. Mis bodas de oro con el folklore paraguayo (Memorias de un Pycháĩ, Asunción, 1980.
· CADOGAN, LEÓN. Ayvu rapyta (Textos míticos de los Mbya-Guarani del Guairá), Asunción, 1992.
· DOMÍNGUEZ, RAMIRO. Morangú, El Lector, Asunción, 2000.
· CADOGAN, LEÓN. Gua'i rataypy, Asunción, 1998.
· VILLAGRA-BATOUX, DELICIA. El guarani paraguayo: de la oralidad a la lengua literaria, Expolibro, Asunción, 2002.
· BOETTNER, JUAN MAX. Música y músicos del Paraguay, Asunción, 1997.
· PÉREZ-MARICEVICH, FRANCISCO. Mitos indígenas del Paraguay, El Lector, Asunción, 1996.
· MELIÀ, BARTOMEU. Una nación, dos culturas, RP ediciones, CEPAG, Asunción, 1988.
· SCHADEN, EGON. Aspectos fundamentales de la Cultura Guarani, Biblioteca Paraguaya de Antropología, Vo1.28, Universidad Católica, Asunción, 1998.
· CLASTRES, PIERRE. La palabra luminosa, Ediciones del Sol, Buenos Aires, 1993.
· SILVA, RAMÓN. Arandu ka'aty, Taller, Asunción, 1990.
· PERASSO, JOSÉ ANTONIO. Ava Guyra kambi, Centro Paraguayo de Estudios Sociológicos, Asunción, 1986.
· PERASSO, JOSÉ ANTONIO; SZARÁN, LUIS. Estacioneros, Vol. 1, N° 2, Estudios folclóricos paraguayos, Asunción.
· CATALDO, JAVIER. Flora medicinal paraguaya, sin más datos.
· BARRIOS ROJAS, VÍCTOR. Motivos populares tradicionales del Paraguay (Volumen I), Asunción, 2002
· VERA, SARO. El paraguayo, un hombre fuera de su mundo, Asunción, 1992.
· SUSNIK, BRANISLAVA. El rol de los indígenas en la formación y en la vivencia del Paraguay (Tomos I y II), Asunción, 1982.
· GÓMEZ SERRATO, DARÍO. Visión de la patria, sin más datos.
· MEZA, MIGUEL ANGEL. Perurima rapykuere, Ediciones Taller, Asunción, 1985.
· CENTURIÓN, CARLOS R. Historia de la cultura paraguaya (tomos I y II), Asunción. 1961.
· MIRÓ IBARS, MARGARITA. Tembi'u rehegua, Carapeguá, 1994.
· MIRÓ IBARS, MARGARITA. Alimentación y religiosidad paraguaya, chipa-pan sagrado, Servilibro, Asunción, 2001.
· RIVAROLA MATTO, ANA MARÍA. Tetãgua rembi'u, Arandurã, Asunción, 1995.
· MASI PALLARÉS, RAFAEL. Ñe’ẽnga y otras yerbas, Asunción, 1994.
· ROSICRÁN. Ne ñe’ẽ roryrã, Buenos Aires, 1986.
· ROSICRÁN. Ñande ypy cuera, Asunción, 1929.
· PANGRAZIO, MIGUEL ÁNGEL. Arriero pórte, El Lector, Asunción, 1994.
· AGUILERA, DOMINGO ADOLFO. Ñe’ẽnga, dichos populares paraguayos, Asunción, CEPAG, 1996.
· MICÓ, TOMÁS L. Leyendas del Paraguay, Asunción, 1997.
· GIMÉNEZ, FLORENTÍN. Rasgos tradicionales del folklore paraguayo, Tavaróga, Asunción, sin año.
· GIMÉNEZ, FLORENTÍN. Música paraguaya, El Lector, 1997, Asunción.
· LÓPEZ BREARD, MIGUEL RAÚL. Mitos guaraníes, Intercontinental, Asunción, 1995.
· CONFERENCIA EPISCOPAL PARAGUAYA. El hombre paraguayo en su cultura, Asunción, 1985.
· KRIVOSHEIN DE CANESE, NATALIA; MARTINEZ GAMBA, CARLOS; ACOSTA ALCARAZ, FELICIANO. Tetãgua remimombe'u, cuentos populares paraguayos, Expolibro-RP Ediciones, Asunción, 1996.
· RIVAROLA MATTO, JUAN BAUTISTA. Karai Rei ohã’ãramo guare Tuka’ẽ Kañy o De cuando Karai Rey jugó a las escondidas, Asunción, 1980.
· ROLANDI, RUBÉN. Kásos, Edisa, Asunción, 1989.
.
DISCOS
· "RECOPILACIONES" (1,2,3,4), de José Antonio Perasso, editado por el Centro Paraguayo de Estudios Sociológicos, sin más datos.
· "PARAGUAY SIGLO XIX. Los años dorados", danzas tradicionales y música, grabadas por la Orquesta Philomúsica de Asunción, bajo la dirección de Luis Szarán, 2002.

No hay comentarios:

Publicar un comentario